La pelea de Devin Haney y Ryan García es un acto absurdo del espectáculo boxístico. Viola el sentido común, agrede la credibilidad del boxeo como deporte o como negocio y ha colocado a todos los actores, sin distinción, en un pozo de vergüenza infinita del que será difícil salir sin heridas. Los que permitieorn esta pelea cruzaron todas las líneas rojas. Si alguien pensaba que todo no pasaba de una comedia, esa escena de Ryan García empinando una botella de cerveza con mirada demencial y un grupo de secuaces asistiendo con sonrisa estupida y sin saber que actitud asumir ante el disparate desbocado del pesaje, prueba lo contrario. García está enfermo y necesita ayuda.
Ryan García no dio el peso, no disputará el título y la pelea en los hechos perdió todo valor deportivo y comercial. Lo único que resta es el morbo y seguro que eso salvará el gasto. Habrá asistencia en la arena y lo que se venda de PPV tendrá una sola razón: el morbo.
¿Hasta donde aguanta Ryan García o hasta donde sorprende Ryan García? es la gran pregunta. Un Ryan que llegará con un peso superior a las 160 libras, al igual que Haney. O sea, Haney que siempre aprovechó de los beneficios de su físico para rehidratar a límites al extremo excesivos. Lo de Haney ha sido abusivo. Basta recordar su pelea contra Vasily Lomachenko, por ejemplo.
Ante Ryan García no habrá ventajas y eso cambia las expectativas. Un boxeador superior en lo técnico, pero sin pegada. Contra un rival que arrastra trastornos mentales, fuerte, rápido y cuya actitud boxística a la hora de la pelea será impredecible. Eso también será parte del morbo ¿Habrá batacazo? Difícil pero no imposible. El tema, como lo marcamos en el video que acompaña esta columna, es que si Haney pierde se termina su carrera y si gana, también habrá recuento de los daños. Se prestó al bochorno por dinero y colaboró en dañar el boxeo. Lo suyo también es lamentable.
1 comentario
Todo empezó por la pandemia;incremento en las enfermedades de salud mental,peleas de YouTuber’s y la desaparición del boxeo en HBO y SHOWTIME. Esperemos que los árabes no le den el último estacazo sl boxeo.